Seminario
Gestión política de crisis
—Ya se trate de una catástrofe natural, una conmoción social o una falla tecnológica a gran escala, la mayor prioridad siempre es la misma. Hay que dejar bien claro que todo es culpa de nuestros oponentes.
Más que votar a quien no tiene la culpa, o tiene menos culpa(según el punto de vista de cada cual), habría que votar a quien vaya a hacer algo para solucionarlo ¿No? Que echar balones fuera lo sabemos hacer todos.
Que con los privilegios que tienen los políticos, también me apuntaba yo a señalar culpables mientras me rasco la panza...
Y es que encima, en los países básicamente bipartidistas, esta actitud se acaba convirtiendo en una enfermedad crónica de la democracia. Que es como trasladar la mentalidad del hincha de fútbol a la política: o los míos, o los rivales.
Si unos le echan la culpa a los otros, pero nadie soluciona nada, a paseo los dos. Que los que vengan después igual lo hacen con la lección aprendida, y si no, pues se les vuelve a repetir, hasta que aparezca alguien que realemente haya entendido lo que es una democracia.
El problema es ¿quién lo va a solucionar? a la hora de ser "oposición" todos se saben las "soluciones", luego se les olvida, si es que realmente tuvieron la intención de arreglar algo y no sólo montarse en el poder otra vez.
(aunque más que "soluciones" lo que saben es el problema que disfrazan de "solución", típico de discurso de campaña).
Y con el bipartidismo tienes toda la razón, la democracia se vuelve una estafa, como votar entre Kodos y Kang. Lo peor es que así es en casi todo en el mundo "democrático", incluso antes de que naciéramos. Algo me dice que a la gente se le va la vida antes de darse cuenta del fraude y cuando lo hace ya no hay fuerzas (tanto físicas como materiales como ideológicas); luego así se pasan las generaciones en lo mismo.
Por ejemplo, en USA se sabe desde hace más de un siglo que los Demócratas y Republicanos son la misma cosa jugando a policía bueno y policía malo; pero el teatro sigue viviendo en las masas.
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Y Tambien aclarar que nunca sera nuestra culpa
ResponderEliminarMás que votar a quien no tiene la culpa, o tiene menos culpa(según el punto de vista de cada cual), habría que votar a quien vaya a hacer algo para solucionarlo ¿No? Que echar balones fuera lo sabemos hacer todos.
ResponderEliminarQue con los privilegios que tienen los políticos, también me apuntaba yo a señalar culpables mientras me rasco la panza...
Y es que encima, en los países básicamente bipartidistas, esta actitud se acaba convirtiendo en una enfermedad crónica de la democracia. Que es como trasladar la mentalidad del hincha de fútbol a la política: o los míos, o los rivales.
Si unos le echan la culpa a los otros, pero nadie soluciona nada, a paseo los dos. Que los que vengan después igual lo hacen con la lección aprendida, y si no, pues se les vuelve a repetir, hasta que aparezca alguien que realemente haya entendido lo que es una democracia.
El problema es ¿quién lo va a solucionar? a la hora de ser "oposición" todos se saben las "soluciones", luego se les olvida, si es que realmente tuvieron la intención de arreglar algo y no sólo montarse en el poder otra vez.
Eliminar(aunque más que "soluciones" lo que saben es el problema que disfrazan de "solución", típico de discurso de campaña).
Y con el bipartidismo tienes toda la razón, la democracia se vuelve una estafa, como votar entre Kodos y Kang.
Lo peor es que así es en casi todo en el mundo "democrático", incluso antes de que naciéramos.
Algo me dice que a la gente se le va la vida antes de darse cuenta del fraude y cuando lo hace ya no hay fuerzas (tanto físicas como materiales como ideológicas); luego así se pasan las generaciones en lo mismo.
Por ejemplo, en USA se sabe desde hace más de un siglo que los Demócratas y Republicanos son la misma cosa jugando a policía bueno y policía malo; pero el teatro sigue viviendo en las masas.
Otra prioridad que siempre está clara también: hay que salvar a los banqueros primero... y únicamente.
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