—Bueno, tampoco es para tanto. A fin de cuentas, cuando solté la soga yo no tenía intención de que te cayera un piano en la cabeza. Te pido disculpas si te sentiste aplastado por un piano.
No hay comentarios
:
Publicar un comentario
Su comentario no molesta. Sírvase utilizar un nombre o pseudónimo para distinguirse de los demás comentaristas. La casa se reserva el derecho de admisión y permanencia. Spam y off-topics, abstenerse.
No hay comentarios :
Publicar un comentario
Su comentario no molesta. Sírvase utilizar un nombre o pseudónimo para distinguirse de los demás comentaristas. La casa se reserva el derecho de admisión y permanencia. Spam y off-topics, abstenerse.