
—¡Ah! ¿Qué? ¿Quién...?
—¡Soy vos mismo dentro de medio minuto!
»¡Rápido! Retrocedé treinta segundos al pasado y date a vos mismo esta máquina del tiempo con estas instrucciones que te estoy dando. ¡Es muy importante! ¡Si no lo hacés, esto no habrá sucedido nunca!
—Eh... Bueno.
—Y otra cosa.
—¿Sí?
PAF
—¿Y eso?
—Por lo que estás a punto de hacerme. ¡ANIMAL!
Lo divertido que es leerlo nueve veces.
ResponderEliminarES GRASIOSO PORQUE LA MÁQUINA QUE SE ENTREGA A SÍ MISMO NO TIENE NINGÚN ORIGEN.
ResponderEliminar¿Equiscasedé? ;)
ResponderEliminarLa "paradoja ontológica" que le dicen, que no es tal, lo paradójico sería que todo tuviera que tener una causa ¡No existiríamos!
excelente!
ResponderEliminarjaja muy bueno!
ResponderEliminarPor cosas como estas, es que como disque escritor que soy, odio los viajes en el tiempo y evito usarlos en mis historias XDDDDDD
ResponderEliminar¿Que estaba a punto de hacerle? o.O
ResponderEliminar¿No habrás visto por casualidad una película que se llama "los cronocrímenes"? Tiene un argumento muy parecido a esta viñeta.
ResponderEliminarhttp://www.filmaffinity.com/es/film927469.html
http://filmoj.net/la-tempokrimoj
Eso le pasa por vengativo.
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